Los efectos anabólicos propiamente dichos de la insulina a nivel hepático son dos. Señálelos:
A Incremento de la síntesis de glucógeno.
B Disminución de la cetogénesis.
C Incremento de la síntesis de ácidos grasos.
I Disminución de la glucogenolisis.
E Disminución de la gluconeogénesis.
A y C. Incremento de la síntesis de glucógeno e incremento de la síntesis de ácidos grasos.
Los efectos anabólicos propiamente dichos de la insulina en el hígado son el aumento de la biosíntesis de glucógeno y de ácidos grasos. Los demás efectos citados son realmente anticatabólicos.