Tener diabetes no tiene por qué restringir los planes de viaje, ya sea ir de camping, de excursión a la montaña, dar una vuelta en automóvil por el campo, como hacer un crucero por el Caribe o volar a Europa. Lo único que sucede es que, como les pasa a los no diabéticos, es mejor planear las cosas de antemano para no tener más tarde sorpresas que alteren el viaje.
Aquí se ofrecen algunas sugerencias para cuando planee su próximo viaje. Se han intentado cubrir todos los tipos de viaje posibles, desde viajes cortos en automóvil en los que pasa fuera una noche, hasta estancias largas en un país extranjero.
Consejos y trucos para diabéticos a la hora de viajar:
- Cuando conduzca, tenga a mano aperitivos que contengan hidratos de carbono. Si empieza a sentir, aunque sólo sea un síntoma suave, una disminución de glucemia, acérquese al arcén, pare y coma 15 g de hidratos de carbono. Hoy en día es también posible comprar una pasta de hidratos de carbono en tubo que no tiene más que apretar en su boca. Espere hasta que los síntomas hayan desaparecido antes de ponerse a conducir de nuevo.
- Lleve siempre un brazalete de identificación médica o una cadenita en el cuello que indique que es diabético, y tenga a mano un número de teléfono de urgencia. También puede llevar una identificación en la cartera o en el monedero con su nombre, dirección, número de teléfono, nombre de su médico y su número de teléfono, así como la dosis de insulina y de otros medicamentos que toma.
- Si está planeando un viaje largo o al extranjero, hágase una revisión médica antes de salir. Quizás le convenga llevar una carta del médico que explique su enfermedad y las complicaciones en el caso de que necesite ayuda de otro médico mientras está fuera.
- Lleve con usted insulina, jeringuillas y pastillas antidiabéticos de más, así como otros medicamentos y sus recetas médicas. Anote los nombres genéricos de sus medicamentos, ya que los nombres de los marcas son diferentes de un país a otro.
- Si la insulina que toma normalmente no se puede adquirir en el lugar que va a visitar, pídale a su médico una receta alternativa. Sin embargo, si es posible, lleve consigo toda la insulina que necesite.
- Si cruza husos horarios, elabore con su médico o su educador de enfermería un calendario para tomar la medicación que tenga en cuenta las diferencias horarias.
- Evite fatigarse. Si tiene que cruzar varios husos horarios, puede que se canse excesivamente sin que se dé cuenta. Asegúrese de que descansa lo suficiente.
- Tenga consigo el nombre de un médico con el que pueda contactar en el lugar que planea visitar.
- Si viaja a un país extranjero, aprenda a decir en el idioma que corresponda tengo diabetes, por favor, deme azúcar o jugo de naranja o por favor, llame a un médico.Escriba estas frases en un papel y llévelo consigo.
- Cuando viaje en avión, lleve en su equipaje de mano la insulina, jeringuillas, píldoras o comprimidos para la diabetes, otras medicinas y algo ligero para comer.
- No se olvide de hacer ejercicio mientras viaja. Si está conduciendo, pare y dé un pequeño paseo cada hora y media o cada dos hora. Si viaja en avión o en tren, paséese por el pasillo para así estimular la circulación. En el caso de los viajes en vehículo de transporte público, aproveche las paradas de descanso para caminar.
- Para evitar mareos y diarrea, pídale a su equipo de seguimiento un medicamento contra los mareos. Cuando viaje a un país extranjero, la diarrea puede ser un problema. Para evitarla, manténgase alejado de la fruta pelada, las verduras con hojas, las carnes y los productos lácteos. Beba solamente agua embotellada y té o refrescos en lata o envases de cartón.
- No beba agua del grifo, ni siquiera la utilice para cepillarse los dientes; tampoco utilice cubitos de hielo.
- Continúe registrando de forma regular sus niveles de glucosa. Viajar puede provocar cambios en sus hábitos alimentarios y de sueño: comidas a las que no está acostumbrado, diferentes niveles de actividad y otras tensiones.