El riñón está situado en las fosas lumbares dentro de un tejido conjuntivo laxo que forma una especie de almohadilla que en las proximidades del riñón recibe el nombre de cápsula grasosa del riñón. En esta zona pueden producirse inflamaciones que reciben el nombre de perinefritis.
Causas de la perinefritis
Si las supuraciones en los órganos vecinos (apéndice, riñón, hematomas traumáticos infectados) se propagan a la celda renal, se origina la perinefritis supurada.
Es posible también que la infección provenga de supuraciones a distancia, como por ejemplo enfermedades supuradas de la piel (forúnculos, panadizos), lo cual suele engendrar una embolia séptica en la corteza renal, que origina una perinefritis supurada embólica o ántrax del riñón.
Incluso unas simples anginas o un proceso infectivo general cualquiera (tifus, pulmonía) pueden producir también esta complicación.
Síntomas de la perinefritis
Tras los antecedentes de haber padecido un forúnculo, una angina o una infección apendicular, aparece a veces un dolor intenso en la región del riñón, con gran sensibilidad de la presión y alteración del estado general con fiebre alta, escalofríos y sensación de enfermedad importante.
Entonces, puesto que en la orina no puede apreciarse ninguna anormalidad, el diagnóstico es muy difícil, pero el médico podrá hacerlo mediante la punción exploradora, que resultará positiva si el absceso está por detrás del riñón, mientras que será completamente negativa si la colección de pus está localizada en la cara anterior del mismo.La radiografía demostrará un abombamiento del diafragma si la colección de pus asienta en la parte alta del riñón.
Tratamiento de la perinefritis
En cuanto se haga el diagnóstico de absceso perinefrítíco será preciso favorecer la evacuación de! pus mediante la agresión quirúrgica del absceso.