Causas de la sífilis.
La sífilis es una enfermedad producida por el treponema pálido, que fue descubierto por Schaudinn. Es un protozoo de forma espiral, con unas veinticuatro vueltas, dotado de movimientos de rotación alrededor de su eje, y de movimientos de traslación.
Transmisión.
La enfermedad se contagia en el ser humano por las relaciones sexuales entre un individuo enfermo y un individuo sano receptivo. Los materiales infecciosos proceden del chancro inicial y de las lesiones de la piel en el período secundario. La sangre también es virulenta durante el período secundario, y ello puede dar capacidad infectante a la saliva, leche, flujo menstrual e incluso orina.
También puede ser contagiada antes del nacimiento: esta sífilis congènita procede siempre de la madre a través de la circulación placentaria. Ello produce abortos, partos prematuros o enfermedades sifilíticas del recién nacido.
Nos limitaremos únicamente a la descripción de la sífilis adquirida por contagio venéreo.
Cuadro clínico.
Período primario o de invasión. Se extiende desde el momento de la aparición de la primera lesión de contacto, que es el chancro sifilítico, hasta el comienzo del segundo período. Dura unos dos meses.
El chancro sifilítico es una lesión que suele localizarse en la región genital, aunque también puede verse en otros puntos, pero siempre en aqudlos que tuvieron contacto directo con la lesión contagiante. Sé trata de una úlcera de color ajamonado y de fondo leñoso: el chancro duro.
Periodo secundario. Al cabo de un par de meses de iniciada la infección, comienza el período secundario coincidiendo con la aparición de unas erupciones en la piel. Este período puede prolongarse hasta unos tres o cuatro años. Y es la fase más contagiosa de la enfermedad. Apresurémonos a decir que cuando el tratamiento sstá bien realizado en la primera fase, se evitará la evolución y el progreso de la enfermedad.
Los síntomas, entonces, recaen en la piel y en las mucosas. En la piel aparece una erupción en forma de pequeñas manchas rosadas (roséola sifilítica), que se generalizan por el cuerpo y desaparecen en unas tres semanas. Se inician sobre todo en la frente, donde dibujan la llamada corona venérea o corona de Venus, y en seguida se extienden a las extremidades y al tronco. En otros casos, en vez de estas manchas, aparecen en la piel lesiones distintas: granitos, úlceras y fístulas.
En las mucosas de la boca, de la garganta y del ano, también aparecen zonas inflamatorias elevadas, de un color grisáceo, muy características, que se llaman placas mucosas y, cuando son muy prominentes, condílomas.
Período terciario. Esta fase representa la localización de las lesiones sifilíticas en distintos órganos: pulmón, arterias, estómago e intestinos, hígado, sistema nervioso central. En cualquier punto que se asienten las citadas lesiones, imprimen una nota de gravedad, puesto que alteran ostensiblemente la morfología del órgano pudiendo originar ulceraciones, perforaciones y cicactrices endurecidas. Todo ello cambia de un modo manifiesto las funciones de aquéllos.
Sífilis tardía. Hemos de considerar aparte la afectación tardía del sistema nervioso, que aparece entre 5 y 30 años después de contraída la sífilis, y cuyas lesiones tienen características de inflamación crónica endurecida (esclerosis) con destrucción de las células nerviosas, y cuyo rasgo más acusada es que no responden o responden muy poco a las medicaciones específicas. Las características clínicas de estas lesiones nerviosas quedan encuadradas en dos enfermedades, que describiremos más tarde : la tabes dorsal, si las lesiones se localizan en la médula ; y la parálisis general, cuando se localizan en el encéfalo.
Diagnóstico.
Recordemos que el médico posee una reacción característica para diagnosticar la sífilis: la reacción de Wassermann. El fundamento de ella es la composición, en el suero sanguíneo del sifilítico, de unas sustancias inmunitarias que se forman frente a la agresión del treponema.
Téngase en cuenta, cabe decir, que si bien esta reacción es muy importante para el diagnóstico de la sífilis, también puede resultar positiva en el reumatismo, el paludismo, la escarlatina, la tuberculosis, la enfermedad del sueño, etcétera.
Importancia social de la sífilis.
Es indiscutible que la enfermedad causa gran mortalidad. Por otra parte, un quince por ciento de los recluidos en manicomios son enfermos sifilíticos. Es un factor de acortamiento de la vida humana porque, al atacar sobre todo al sistema circulatorio, ocasiona el envejecimiento prematuro, disminuyendo la defensa frente a distintas infecciones. Como hemos dicho, asimismo es causa de abortos y partos prematuros, con disminución de la natalidad en unos casos; o aumento de la mortalidad infantil en niños nacidos de matrimonios sifilíticos, en otros.
Todo ello nos explica la extraordinaria trascendencia social de esta lacra que deberá ser combatida por todos los medios.
Prevención.
Prevenir el contagio de la sífilis significa establecer una lucha antivenèrea muy bien organizada, que se basará en los siguientes puntos :
- Abolición de la prostitución (por decreto ley de 10 de marzo de 1956 fueron abolidos todos los centros de tolerancia en España).
- Declaración obligatoria de los enfermos.
- Tratamiento obligatorio de los mismos, que deberá ser gratuito, precoz, suficiente y realizado en centros no exclusivamente antivenéreos, sino en polidispensarios que permitirán mantener el secreto.
- Servicio social con personal especializado que investigue las fuentes de contagio: prostitución clandestina, etcétera.
- Abstinencia sexual durante el período contagioso. Incluso en los casos sanitariamente peligrosos por su rebeldía a ser tratados deberá llevarse a cabo la hospitalización forzosa.
- A las enfermas que acudan al dispensario, orientarlas sanitariamente, recomendándoles la periodicidad en el tratamiento. Y evitar siempre un régimen riguroso de sanciones, pues a la larga disminuiría la concurrencia de las enfermas al dispensario.
- Difundir y mejorar el conocimiento sobre estos temas por. medio de conferencias, para que los jóvenes eviten las relaciones sexuales ilegítimas y mantengan la abstinencia hasta el matrimonio. La virtud de la castidad es más eficaz que todas las armas medicamentosas y todas las organizaciones sanitarias.
- Medidas gubernamentales que mejoren las condiciones de vida de la mujer, lo cual disminuirá la prostitución. Redención de la mujer caída, para que pueda ganarse el sustento de modo digno y honesto, luchando contra los que se lucran de la trata de blancas. Moralización de las costumbres y persecución del intrusismo y de la charlatanería en la profesión médica.
- Instruir a las personas para que no inicien por su cuenta ningún tratamiento sin el control y la vigilancia del médico.
- Muy útil es la prevención individual. Siempre que sea posible, se ordenará con carácter obligatorio entre los soldados, en el Ejército. Se basará en el lavado jabonoso inicial, seguido de la aplicación de una pomada mercurial y argiroi en la uretra, después de haber tenido trato íntimo con mujeres dudosas.
Tratamiento.
Ha quedado definitivamente establecido que el antibiótico más positivo para todos los tipos de sífilis es la penicilina. En la sífilis primaria y secundaria, la administración de una dosis única de dos millones y medio de unidades de penicilina benzatina G, es en muchos casos suficiente para curar la enfermedad.Enfermedad producida también por una espiroqueta, que se transmite al hombre por la mordedura de ratas, gatos, comadrejas, ratones y perros. Raramente se presenta en Europa.
Después de una incubación que puede durar un mes, empieza con fiebre, endurecimiento de la zona mordida, inflamación de los ganglios próximos a esta región y aparición en la piel de unas manchas rojizas muy características.
El tratamiento se basa en la administración de penicilina y neosalvarsán.