La administración parenteral de fructosa (levulosa) por vía parenteral puede producir algunos de los siguientes efectos metabólicos indeseables:
- A Cetoacidosis e hipertrigliceridemia.
- B Hipoglucemia grave y neuroglucopenia.
- C Hiperoxaluria y litiasis renal.
- D Hiperuricemia y acidosis láctica.
- E Acidosis urémica e hipercaliemia.
D. Hiperuricemia y acidosis láctica.
La aparición de hiperuricemia y acidosis láctica tras la administración de fructosa por vía intravenosa ha conducido a ser prudentes con el empleo de dicho carbohidrato en nutrición parenteral con el objetivo de obviar el uso de glucosa en diabéticos.
Efectivamente, tanto en enfermos como en sanos, la inyección parenteral continua de fructosa provoca hiperuricemia e hiperuricosuria, así comohiperlactatemia y acidosis láctica (en relación con la cantidad y ritmo de infusión).
La fructosa resulta un sustituto insatisfactorio de la glucosa en nutrición parenteral. La anoxia, lesión hepática, diabetes mellitus, errores congénitos del metabolismo de la fructosa, lactato y amoníaco, así como la glucogenosis tipo I (Von GIERKE) constituyen contraindicaciones absolutas.
El diagnóstico de acidosis respiratoria aguda es, por lo general, evidente a partir de la situación clínica. Un estudio analítico muestra un descenso del pH con aumento de la pCO,. La p02 será normal o disminuida según el grado de hipoxia.