La introducción de las sulfonilureas hipoglucemiantes

La carbutamida fue la primera sulfonilurea utilizada clínicamente en el tratamiento de la diabetes mellitus por los alemanes Franke y Fuchs en el año 1955 (BZ-55). Por poseer el grupo paminobenceno es una sulfonamida con propiedades antibacterianas distintas de las posteriores sulfonilureas (tolbutamida, cloropropamida. acetohexamida. metahexamida, glibenclamida. glipizida, etc).

Bertram, Benfeld y Otto confirmaron las conclusiones de Franke y Fuchs.

Bänder estableció que las sulfamidas hipoglucemiantes actuaban estimulando las células de los islotes de Langerhans, lo que sirvió de confirmación a los estudios de Loubatiéres con el 2254-RP, otra sulfonamida hipoglueemiante.

Unger y Madison introdujeron el test de la tolbutamida intravenosa para el diagnóstico de la diabetes mellitus.