Primero auxilios en caso de intoxicación por el gas del alumbrado.
Por su extraordinaria importancia y frecuencia, explicaremos las medidas de urgencia contra la mencionada intoxicación, caso de perder el conocimiento:
- Primero: Ante todo, es preciso apartar al individuo de la atmósfera en que se intoxicó, trasladándolo al aire libre.
- Segundo: Desabrocharle los vestidos, sobre todo por el cuello y la cintura.
- Tercero: Proceder inmediatamente a practicar la respiración artificial empleando el método de Holger-Nielsen. Este método consiste en colocar el paciente acostado sobre el vientre con los codos doblados, los brazos por debajo de la cabeza, con una mano sobre la otra y la mejilla apoyada en la mano, la cara un poco ladeada. El auxiliador pone una rodilla frente a la cabeza del accidentado y coloca el pie del lado opuesto cerca del codo. Se aplican las manos en el dorso del paciente de tal manera que los pulgares se toquen entre ellos estando las palmas de las manos justo por debajo de la línea que une ambas axilas. Entonces el auxiliador se inclina lentamente hacia delante con los codos extendidos, hasta que sus brazos estén casi verticales, ejerciendo una firme presión sobre el tórax.
Entonces comienza a inclinarse lentamente hacia atrás y desliza las manos hacia los brazos del paciente justo hasta por debajo de los codos. Se doblan los brazos hacia arriba hasta que la resistencia y la tensión sean transmitidas hasta los hombros del enfermo. Se dejan caer en seguida los brazos. Esto constituye un ciclo completo.
Los ciclos se repiten doce veces por minuto, siendo de igual duración las fases de expansión que de compresión. Los períodos de paro deben ser mínimos. - Cuarto: Se administrará oxígeno puro al 100 por 100 aplicándelo con una mascarilla o bien dándole una mezcla que contenga 95 % de oxígeno y 5 % de anhídrico carbónico (muy útil puesto que éste actúa estimulando el centro respiratorio). Hay dos maneras de improvisar la administración de anhídrico carbónico: con el método de boca a boca soplando en la boca del paciente a través de un tubo conectado con la mascarilla, o haciéndole respirar un sifón puesto boca abajo para que ceda el gas.
- Quinto: La administración de estimulantes del centro respiratorio: lobelina, coramina, administrados lentamente por vía intravenosa.
- Sexto: Exsanguinotransfusión, que consiste en practicar una sangría de medio litro, seguida de una transfusión de volumen similar.
- Séptimo: Glucosa al 50 % intravenosa (100 cc.) para reducir el edema cerebral.