El mal de Parkinson

El mal de Parkinson, no tiene edad. Es un mal degenerativo del sistema nervioso que hace que cosas tan sencillas como hablar, agarrar un tenedor o abotonarse una camisa, se vuelvan difíciles. Investigadores han descubierto puntos importantes sobre este mal, así como algunos pasos preventivos que se pueden seguir para protegerse.

Es muy importante preguntarle siempre a su doctor, antes de tomar cualquier medicina o suplemento no recetado por un médico. En un estudio hecho en la Universidad de Harvard, personas que tomaron Ibuprofeno diariamente, estuvieron menos expuestas en un 40%, a desarrollar la enfermedad de Parkinson.

Según los expertos, el Ibuprofeno si trabaja, ya que previene la inflamación del cerebro que puede empezar o empeorar, dañando nervios estratégicos.
Tomar 2000 IU de vitamina D, con 2 g. de aceite de pescado diariamente, puede cortar a la mitad el riesgo de sufrir esta enfermedad.

La vitamina D no es solo una vitamina, es una hormona que mejora la función de montones de nervios que protegen los genes en el cerebro.
El aceite de pescado termina con cualquier inflamación que ocurra en el cerebro, ya que esta inflamación, es un punto clave en esta enfermedad.

Una manera de parar la activación de puntos claves de esta enfermedad, es con el café o te verde. Estas bebidas cambian los genes que producen glutatión, que es un antioxidante que ayuda a proteger, trabajando rápidamente en los nervios inactivos, dañando las toxinas, como si fuera un pesticida.

El glutatión es un antioxidante que ayuda también a curar cualquier parte del cerebro que haya sido lesionada por estos problemas.
Estudios de la Universidad de Hawaii, sugieren que la toma de dos tazas de cualquiera de estas dos bebidas diariamente, es suficiente para regular la producción del glutatión.

Ejercitarse por 30 minutos cinco veces a la semana, mantiene el sistema nervioso en forma y evita en un 40%, que este mal llegue a su cerebro.
Si usted ya lo tiene, trate el tai chi, esta es una técnica oriental, que ayuda a mejorar el balance, el control y el movimiento de los músculos.