La coccidiomicosis es una enfermedad infecto-contagiosa producida por un hongo que puede causar en el ser humano dos formas clínicas. Una forma pulmonar que por su sintomatología muestra un aspecto parecido a la tuberculosis y que, lo mismo que ésta, puede determinar complicaciones supurativas en los huesos y articulaciones; y una forma de contagio a través de la piel, que es mucho menos frecuente.
El tratamiento más específico es el antibiótico anfoterina B, que se administrará por vía intravenosa.