Con diversas las causas que provocan la hipoglucemia, veamos las más significativas.
– Error en la dosificación
Es una de las causas más frecuentes. El cambio inadvertido de tipo de jeringa, o el cambio de concentración de insulina al pasar de un frasco de 40 U. a otro de 80 U., sin efectuar la corrección, hace que se administre una dosis superior a la que corresponde. Es conveniente que el médico controle personalmente el tipo de jeringa y la concentración por centímetro cúbico del frasco de insulina.
– Aumento de actividad física
El cambio brusco de actividad física, por la práctica de deportes o por un esfuerzo de trabajo extraordinario, determina una combustión extra de hidratos de carbono por el ejercicio, una depleción de glucógeno y la consiguiente hipoglucemia. Ésta puede presentarse inmediatamente o después de un intervalo de varias horas. Es necesario prevenirla mediante el agregado de una cuota adicional de glúcidos Es clásica la indicación de una bebida glucocarbonatada o de una taza de café con azúcar y tostadas previo a cualquier partido de rugby, fútbol, etcétera.
– Disminución de la ingesta de glúcidos o interferencias en la absorción intestinal
Una de las más firmes objeciones a la denominada dieta libre es la variabilidad de la ingesta de glúcidos y la irregularidad de la distribución de los mismos en el horario de las comidas en sujetos que se administran insulina. Se quiebra la relación glúcidos-insulina y todo queda supeditado al juego de dos variables. Esto se manifiesta en la frecuencia de hipoglucemias en sujetos que omiten la merienda o reemplazan caprichosamente el almuerzo o la cena por una colación con dosis arbitrarias de hidratos de carbono.
Otra causa reside en cualquier alteración del mecanismo de la absorción intestinal, en especial vómitos y diarreas. Esto obliga al médico a efectuar en estos casos la profilaxis de la hipoglucemia administrando siempre glúcidos por vía bucal o parenteral.
– Diabetes con glucemias lábiles
Es uno de los problemas más serios y difíciles que se le plantean al diabetólogo. En este caso, la alternancia entre hipoglucemia e hiperglucemia con cetonuria o sin ella, no responde a lógica alguna.
La hipoglucemia se presenta inopinadamente, con la misma dosis de insulina que el día anterior, a la misma hora y con la misma dieta. La angustia y la tensión emocional del paciente y la frustración que siente al ver al médico desarmado ante estos casos complica la situación. En esta circunstancia es mejor optar por mantener al diabético con un límite alto de glucemia.
– Diabetes con endocrinopatías hipoglucemiantes
La asociación de diabetes con hipopituitarismo (en especial síndrome de Shehan) o con insuficiencia cortico suprarrenal, como también los diabéticos hipofisectomizados o suprarrenalectomizados presentan hipoglucemias graves, que pueden llevar, si no se sabe manejar la insulina o drogas, a la muerte. Antes de la introducción de los glucocorticoides en la terapéutica, la mayor parte de los diabéticos addisonianos murieron por hipoglucemia.
Causas que provocan la hipoglucemia, caso de estudio
En un enfermo diabético complicado con Addison ocurrió hipoglucemia cuando se le suministraba una dosis terapéutica (250 mg de clorpropamida).
Se han descrito también las hipoglucemias motivadas por la liberación brusca de la insulina previamente ligada al plasma en los casos de cesación de insulinorresistencia, postoperatorios o convalecencia o después de una cesárea.
La hipoglucemia no se presenta por lo común con brusquedad. Tiene signos particulares según el enfermo, que puede ser un cosquilleo en la boca o una parestesia, sudoración de la mejilla, etc. Permite así iniciar temprano el tratamiento. Hay, sin embargo, circunstancias en que el coma aparece sorpresivamente: a) En muchos enfermos tratados con insulina cinc-protamina, en que la hipoglucemia se inició durante el sueño y son hallados por un familiar, inconscientes, empapados en sudor; b) muchos diabéticos infantiles a quienes por dificultad de expresarse recién se descubre que están en hipoglucemia cuando se inician las convulsiones y están al borde del coma; c) algunos diabéticos en que el síndrome comienza con una abolición de la voluntad que los incapacita para ingerir el azúcar o los caramelos que llevan consigo y que rápidamente pasan al estupor o a la inconsciencia.